Un ciudadano japonés encontró una misteriosa esfera de metal en la playa de Enshu, en la ciudad de Hamamatsu en Japón.
Tras el avistamiento de la esfera el sujeto avisó a la policía de Japón, quienes, a través de una unidad especialista en explosivos, rodearon el objetivo y determinaron que no existía un riesgo de estallido.
Las especificaciones del objeto señalan que mide 1,5 metros de diámetro, está oxidado y tiene una saliente en forma de asa, que permitiría engancharlo a otro elemento. Además, un análisis de rayos X reveló que estaba hueco.
Esta esfera se suma al interés de los objetos no identificados, luego de que se derribaran una serie de "ovnis" en distintas partes del mundo, pero que Estados Unidos asoció a un programa de espionaje chino.
Por el momento se desconoce el origen de la esfera y, por el momento, no se descarta que sea un elemento de espionaje de Corea del Norte o China.