La angustia dio paso al alivio en el Aeropuerto de Santiago, donde este jueves regresaron los hinchas de Universidad de Chile que viajaron a Argentina para el suspendido partido contra Independiente por la Copa Sudamericana.
Los graves incidentes de violencia en las tribunas dejaron en vilo a sus familias, que aguardaron con nerviosismo en el terminal aéreo hasta poder reencontrarse con sus seres queridos.
Entre las escenas más conmovedoras estuvo la de Jadra, madre de Felipe, quien lo esperaba junto a dos de sus amigos. En conversación con el matinal Mucho Gusto de Mega, relató la angustia que vivió durante horas sin saber lo que pasaba. “No se lo doy a ninguna mamá esta angustia. No saber lo que estaba pasando”, dijo con la voz quebrada.
Cuando finalmente pudo abrazar a su hijo, rompió en llanto y expresó su gratitud: “Gracias a Dios está bien él y todos sus amigos. Lo único que quería era tenerlo en casa”. Ya más tranquila, la mujer agradeció el apoyo recibido y envió un mensaje de fortaleza a las demás familias que compartieron la misma incertidumbre. “Fuerza a todas las mamitas de la bullanguera que están pasando por este momento tan difícil. Harta fuerza”, expresó.
Antes de despedirse, dejó una frase que caló hondo en el espíritu azul: “Si no sufrimos, no somos la Universidad de Chile”, un recordatorio de la pasión y resiliencia que caracteriza a los hinchas del club.