La cantante chilena Camila Gallardo ya había enfrentado en 2018 la filtración de material íntimo que vulneró su privacidad y generó un amplio revuelo en redes sociales. En ese momento denunció públicamente lo ocurrido y defendió el derecho de las mujeres a decidir sobre su imagen. Hoy, nuevamente, habría sido víctima de la difusión de contenido privado junto a quien sería su actual pareja; sin embargo, hasta ahora la artista no se ha referido públicamente a esta nueva situación.
Paralelamente, Cami —que supera los 2,1 millones de seguidores en Instagram— ha compartido en distintas ocasiones fotografías artísticas en topless, con las que ha desafiado los límites de censura de la plataforma. No obstante, la situación actual es distinta, ya que se trataría de material sexual explícito no autorizado y no publicado por ella, lo que reabre el debate sobre vulneración de privacidad y violencia digital.
Formada en The Voice Chile y nominada a los Grammy Latinos y Grammy, Cami ha consolidado una estética que mezcla vulnerabilidad, identidad visual y un discurso propio. Sus álbumes Rosa (2018) y Monstruo (2020) la posicionaron como una de las voces más influyentes de su generación, con éxitos como Más de la mitad, Abrázame, Querida rosa y Funeral. En 2022, desde un concierto en Concepción, volvió a referirse a las dificultades de ser mujer en la industria musical, afirmando: “Ser mujer dentro de la música es muy duro… la expectativa es imposible de cumplir”.
