La violencia nuevamente golpea a Lima, Perú, esta vez con el brutal asesinato de Giovanni Samán Espinoza, un joven militar de solo 21 años. El ataque, perpetrado por un grupo de al menos diez sujetos, fue transmitido en vivo por los responsables, quienes serían integrantes de una barra brava, según los primeros antecedentes policiales.
El crimen ocurrió mientras Giovanni observaba un partido de fútbol de barrio, muy cerca de su domicilio. Al percatarse del peligro, el joven intentó huir hacia su casa, pero resbaló antes de llegar. Fue en ese momento que los agresores le dispararon, con tres balazos fatales, mientras transmitían el ataque por redes sociales. “Le estancaron sus sueños. Mi hijo no ha pertenecido a ningún equipo, sólo se dedicaba a sus estudios y quería ser un joven positivo para el futuro”, expresó entre lágrimas su madre.
La hermana del soldado, consternada, relató cómo Giovanni intentó proteger a un niño de 12 años antes de ser interceptado. “Mi hermano ha jalado a un niño y lo ha llevado a la puerta de mi casa para salvarlo”, contó. Pese a su gesto heroico, no logró escapar del brutal ataque que le arrebató la vida y conmocionó a la comunidad.
Hasta ahora, la policía ha detenido a dos menores de edad, de 13 y 16 años, quienes estuvieron involucrados en el crimen y fueron encontrados en posesión de armas de fuego. El informe preliminar de la autopsia indica que Giovanni falleció por los graves golpes recibidos, no por los disparos. Se espera que las pericias y la necropsia confirmen los detalles del crimen que ha dejado en shock al país.